Tomando como punto de partida el principio básico de la educación ambiental “Se protege lo que se ama y se ama lo que se conoce”, Huellas y Raíces persigue la protección de la naturaleza y la conservación de su biodiversidad despertando un sentimiento de afecto y pertenencia hacia el medio natural en los visitantes, a través de la transmisión de conocimientos y puesta en valor de la riqueza natural de Cuenca. En nuestras actividades pretendemos generar una sensibilización hacia el entorno que se visita a la vez que se disfruta de una jornada de ocio en la naturaleza, aunando así el aprendizaje de conocimientos y valores con el disfrute de nuestros clientes.

Al ser una iniciativa basada en el ecoturismo y que desarrolla sus actividades en espacios naturales protegidos de alto valor ecológico y paisajístico, tratamos de generar el menor impacto posible en los entornos que recorremos, respetando su biodiversidad y cumpliendo las normativas de los espacios. Es por ello que trabajamos con grupos reducidos no superiores a 15 personas y siguiendo una serie de principios de respeto hacia la naturaleza, de este modo también conseguimos un servicio más cercano con el cliente. Perseguimos la idea de solo dejar nuestras huellas al caminar.

Por otro lado, buscamos recordar y viajar a nuestras raíces con cada actividad, poniendo en valor el patrimonio cultural de las comunidades rurales que habitan los espacios que visitamos y que en cierta medida forman parte del paisaje natural. Es por ello que contamos con los servicios que estos municipios ofrecen y que complementan nuestras actividades, generando de este modo una experiencia mucho más enriquecedora y respetuosa, fomentando el consumo de productos y servicios locales y colaborando así en el desarrollo de estas comunidades rurales.